Con una multitudinaria participación y el acompañamiento del intendente de Campo Quijano, Lino Yonar, se vivió una nueva edición de la tradicional Fiesta de la Papa Andina en El Alfarcito, corazón de la Quebrada del Toro.
El pasado sábado 12 de julio, el paraje de El Alfarcito, ubicado a más de 2.800 metros sobre el nivel del mar y a la vera de la Ruta Nacional 51, fue nuevamente sede de una de las celebraciones más representativas del interior salteño: la Fiesta de la Papa Andina.
El evento, que nació en 2011 por iniciativa del recordado Padre Sigfrido «Chifri» Moroder, tiene como objetivo revalorizar el trabajo ancestral de los productores de altura y fortalecer el arraigo cultural de las comunidades de la Quebrada del Toro.
Durante toda la jornada, vecinos, turistas y emprendedores compartieron un espacio cargado de tradiciones, sabores regionales, música, rituales comunitarios y sobre todo, un profundo reconocimiento al trabajo rural.
“Hoy vivimos una jornada de mucho carisma, trabajo y alegría”
El intendente de Campo Quijano, Lino Yonar, acompañó el evento y expresó su orgullo por esta celebración tan significativa para la región:
“El trabajo y el esfuerzo en el campo de nuestros hermanos de la Quebrada del Toro, el día de hoy fue puesto en escena.
Hoy, en El Alfarcito, vivimos una jornada de mucho carisma, trabajo y alegría, producto de todo lo que sembró el Padre Chifri.
Esta fiesta genera oportunidades de trabajo para nuestra gente, y es ahí donde me encontrarán, acompañándolos.”
El evento inició con una ofrenda a la Pachamama, seguido por un desayuno comunitario y una feria de papas andinas, donde los productores exhibieron y vendieron las variedades cultivadas en zonas de altura, famosas por su sabor y valor nutricional.
También se ofrecieron comidas regionales como locro, empanadas de charqui, tortillas asadas, dulces artesanales, además de un festival folclórico con la participación de grupos locales, como Brillantes Latinos, Inti Suma, Canto Fronterizo y el show infantil del Payaso Autito.
Una fiesta que crece año tras año
La Fiesta de la Papa Andina se ha convertido en una referencia del calendario cultural del Valle de Lerma y la Puna salteña. Reúne a más de 3.000 personas cada año, generando un fuerte impacto económico y social en las comunidades de montaña.
Además de la celebración, la jornada refleja el trabajo permanente de las instituciones locales, la escuela albergue de El Alfarcito y el compromiso por preservar las tradiciones andinas y la producción local en condiciones climáticas adversas.
Campo Quijano reafirma así su rol como puerta de entrada a los Valles Calchaquíes y a la Puna, y como un municipio comprometido con el desarrollo sustentable de sus comunidades rurales.
